Bienvenidos a la Red!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!

YO ESTOY EN RED !!!!

Cuando decimos Estoy en Red....no sólo entendemos que estamos conectados sino que también sabemos que podemos contar con alguien. Pues bien, hemos generado este espacio cibernético, que de una manera u otra, también es una Red. En este caso una red de computadores a través de internet. Este Blog pretende generar espacios de conversación para abrir nuevas posibilidades de acción o bien para abrir otras conversaciones que tengan que ver con el desarrollo económico local de nuestra provincia de Chiloé.

Bienvenidos...bienvenidos a esta nueva posibilidad de interacción conversacional entre profesionales y técnicos que estén realizando gestiones en el desarrollo económico local.

Diagnóstico a estructuras municipales orientadas al Fomento Productivo y Desarrollo Económico Local en la Provincia

Las acciones de fomento productivo constituyen una realidad relativamente nueva para los municipios de la provincia. Si bien de alguna forma, algunos de ellos realizaban hasta antes del año 2000, diversas iniciativas que se pueden considerar como inscritas en el ámbito del fomento productivo, no es sino hasta esta fecha en que se comienza a desarrollar una acción planificada, coordinada e instalada en la estructura municipal.

En esto tuvo un rol preponderante la acción ejercida desde la Asociación Provincial de Municipalidades de Chiloé, entidad que a través de un equipo de profesionales comenzó un proceso de instalación del tema en los distintos municipios de Chiloé. Adicionalmente, la acción realizada desde el INDAP -por intermedio de su programa Prorural- y desde el Fosis, éstos permitieron abrir espacios en los municipios para que la temática “fomento productivo” se fuera instalando de manera progresiva.

Las realidades de fomento productivo en cada uno de los municipios de la provincia presenta situaciones muy disímiles contamos con municipios en que existen Departamentos de Desarrollo Económico Local en que la dotación profesional y /o técnica supera las 20 personas y municipios en que aún el fomento productivo es una acción más bien incipiente en que sólo se cuenta con un profesional encargado del área y no existe claridad en la cantidad de ejes productivos abordados.

Es así que las acciones que desarrollan los municipios de la provincia de Chiloé, se enfocan de manera preferencial hacia las mipes. Esto significa que, por distintas razones, quedan generalmente fuera del ámbito de acción empresas de un tamaño mayor al de las microempresas.

En consecuencia, el fomento productivo queda restringido a la prestación de servicios de apoyo al desarrollo de oportunidades de negocio –individual y colectivas- muy cercanas a los microemprendimientos. En razón de lo anterior, es posible afirmar que el efecto sobre los sistemas económicos locales no será de gran importancia y magnitud.

Por otra parte, las acciones de fomento productivo –en la mayoría de los casos- se enfoca desde la perspectiva de la demanda y no desde la oferta. Esto significa que los apoyos prestados se orientan preferencialmente a suplir déficit y brechas identificadas, más que al fortalecimiento de la oferta.

De esta forma, subsiste una cultura –por parte de los usuarios- de entender el fomento productivo como una fuente más de financiamiento de planes, programas, pero especialmente de proyectos de microemprendimiento, situación que dificulta el surgimiento de redes microempresariales ordenadas en función a sectores económicos. De igual forma, este hecho constituye una traba para el desarrollo de acciones de fomento productivo del tipo “cluster” que permitirían mejorar los niveles de competitividad y rendimiento.

La empresarización

Hasta hace pocos años se prestaba poca importancia al fenómeno de la empresarización, que incluye tanto la vocación empresarial para las etapas iniciales de creación y desarrollo de negocios, como para las fases siguientes de crecimiento y consolidación.

En la actualidad, los estudios aplicados y el diseño de políticas específicas han subrayado la importancia del tema para potenciar la disponibilidad y calidad de este particular recurso, esencial para el desarrollo de los sistemas productivos locales.

Es, de hecho, “la empresarización”, el fenómeno productivo que permite al pequeño productor formalizar sus actividades incorporándole al sistema productivo nacional (aparato productivo) por una parte y acceder a diversos instrumentos de apoyo y consolidación productiva por otra.

El Territorio...

El territorio puede jugar un papel preponderante, es - además - el lugar de interacción entre los actores del desarrollo, donde se dan los espacios de cooperación entre sub territorios, es allí donde se re-organiza y re-inventa la división social del trabajo y cada uno de los procesos de desarrollo productivo.

Estos elementos han llevado a una creciente inclusión de las variables territoriales y locales tanto en
el análisis como en el diseño e implementación de políticas vinculadas al fomento productivo en nuestro país. Se hace necesario considerar que el enfoque basado en el fomento a la articulación productiva requiere que el sector público desarrolle capacidades institucionales que permitan consolidar experiencias asociativas.

Ejemplo de ello son las necesidades de producir y difundir nuevos conocimientos, desarrollar competencias en instituciones existentes o crear instituciones para mejorar la coordinación entre los agentes productivos e institucionales de una determinada comunidad. Todo a fin de desarrollar la capacidad de estimular los recursos potencialmente disponibles en el territorio para activar dinámicas que fortalezcan la capacidad productiva de los sistemas productivos locales.

Importancia de la articulación para el desarrollo económico local

En los últimos años, los temas vinculados con la articulación productiva han tenido una amplia difusión, ya por fines investigativos o mediante experiencias diseñadas y/o implementadas por el Gobierno Central, en algunos casos con apoyo de organismos internacionales cuyas finalidades incluyen el fomento de iniciativas de carácter productivo y/o que apuntan a la diversificación productiva de nivel local como una forma de mejorar las acciones y las opciones dirigidas en pro del desarrollo de las comunidades más carenciadas.

Hasta la década del ochenta, se construían políticas fuertemente vinculadas al sector manufacturero.
Más allá de los argumentos económicos contra esa concepción de la política industrial y de los cambios que se han producido en nuestro país a propósito de su ingreso acelerado a un contexto de globalización, de economías abiertas y de producción a gran escala, la oposición de los agentes políticos que propiciaron el modelo económico característico de la década siguiente consolidó un estereotipo que resaltaba el conflicto entre políticas desarrollistas versus políticas neoliberales (Pérez, 2005).

Los frágiles impactos obtenidos en términos de un desarrollo más equitativo y sostenible en el pasado reciente constituyen un llamado de alerta e invitan a diseñar políticas innovadoras que tengan en cuenta la complejidad del territorio, su heterogeneidad estructural y su dinámica económica y social. Las políticas de apoyo a la articulación productiva, al incorporar lecciones de experiencias que dejan de lado las visiones simplistas, han generado consenso aportando elementos innovadores para el análisis de diferentes situaciones socio productivas y para el diseño y la implementación de acciones eficaces.


Existen (al menos) dos factores centrales para explicar por qué es necesario complementar las políticas públicas orientadas a facilitar y promover el acceso a los mercados con la necesaria articulación entre los distintos actores. Uno de ellos es la evidencia de que la creación de espacios de cooperación estimula la generación de ventajas competitivas y externalidades que contribuyen a consolidar y acelerar los procesos de desarrollo económico local. Segundo, las restricciones financieras asociadas a instituciones municipales más pequeñas que – en el caso de Chiloé- limitan la contratación de profesionales exclusivos para el desarrollo de acciones vinculadas al fomento productivo al margen de las políticas productivas.

Estas restricciones impulsan la incorporación de esquemas asociativos en los programas de fomento como una manera de responder a la necesidad de reducir las brechas operativas, y promover el desarrollo económico local mediante el fortalecimiento de sus oficinas (DEL y/o sus direcciones de desarrollo económico) y de la diversificación productiva generando apoyos transversales a los profesionales que trabajan esta línea para que sean ellos los que a escala local promuevan el desarrollo económico local aumentando sus posibilidades de acción y con ellos el número de beneficiarios, y sus efectos en el territorio.